EL SOL Y NEPTUNO
La compasión es un aspecto que va desde el Sol a Neptuno y siendo el Agua el elemento remarcado por este aspecto. No caben dudas de que, entre otras cosas, el resultado es el conocimiento cabal de lo que significa ser una víctima o un salvador.
La imagen de ideal y hasta de "fantasmal" de Sol Neptuno, está destinada a suplir de alguna manera esas ausencias que se sienten en el alma, sabiendo que la protección que nos guía, va más allá de todo tiempo y distancia y que nos envuelve con su abrazo como un salvador incondicional ante nuestras desgracias.
Los que buscan la verdad o algo que los aliente, se pueden sentir perdidos, como se sienten las víctimas en el medio de un gran oleaje que el dios del mar sabe agitar. Sentimientos de pérdida, de no saber quien se es o en una expresión superior, una gran capacidad de empatía para con los demás.
El Sol que también se halla junto a Mercurio, pierde los límites y afronta el conflicto disolviéndose en el martirio, resignándose al dolor, buscando justicia o aprendiendo los dones de la visión del más allá como lo inevitable pero que tiene que tener algún sentido. En cuanto al mundo de lo racional, Mercurio no se guía por la objetividad sino por el sentimiento, pasando a ser un momento para descargar de "la nube", una gran cantidad de información proveniente de lo invisible.
Días de melancolía que describe perfectamente a los marinos perdidos. Creatividad, poesía, arte, rezar, servirían como exorcismo o forma de tomar contacto con eso que ya no se puede tocar con otra cosa que no sea el alma.
La imagen de ideal y hasta de "fantasmal" de Sol Neptuno, está destinada a suplir de alguna manera esas ausencias que se sienten en el alma, sabiendo que la protección que nos guía, va más allá de todo tiempo y distancia y que nos envuelve con su abrazo como un salvador incondicional ante nuestras desgracias.
Los que buscan la verdad o algo que los aliente, se pueden sentir perdidos, como se sienten las víctimas en el medio de un gran oleaje que el dios del mar sabe agitar. Sentimientos de pérdida, de no saber quien se es o en una expresión superior, una gran capacidad de empatía para con los demás.
El Sol que también se halla junto a Mercurio, pierde los límites y afronta el conflicto disolviéndose en el martirio, resignándose al dolor, buscando justicia o aprendiendo los dones de la visión del más allá como lo inevitable pero que tiene que tener algún sentido. En cuanto al mundo de lo racional, Mercurio no se guía por la objetividad sino por el sentimiento, pasando a ser un momento para descargar de "la nube", una gran cantidad de información proveniente de lo invisible.
Días de melancolía que describe perfectamente a los marinos perdidos. Creatividad, poesía, arte, rezar, servirían como exorcismo o forma de tomar contacto con eso que ya no se puede tocar con otra cosa que no sea el alma.
Poetas o locos, soñadores o borrachos, creadores o pordioseros y toda la gama de inspiración/desesperación que cubre este planeta, pueden dar momentos aptos para la creatividad y las artes que se expresan con palabras provenientes de la sin razón o también para perder la orientación, la sinceridad o la capacidad de discernir entre realidad e irrealidad.
El resultado depende siempre de nuestros aspectos y trabajo personal en la Carta de nacimiento, sin embargo, suelen darse mezclas de luz y sombra con cada encuentro que vibra en el cielo y se refleja en la Tierra. El fin es aprender!
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